Si en los años 80 hubiera visto este video como anuncio de TV, creo que sólo hubiera dejado mi silueta humeante en la puerta de la casa en mi prisa por salir a comprar todos los Transformers que pudiera. Hoy que lo veo el efecto no es tan crítico, pero sí me emocionó mucho ver el arte de los empaques originales de una forma más animada:
Gracias a Topless Robot por el enlace al video