Anime impresiones: Ore Monogatari!!

Usualmente las historias de amor son sobre el período en donde se conocen los protagonistas y crece su atracción mutua, y el momento culminante es cuando al fin se declaran su amor. Pero hay al menos un anime que cuenta la historia de un noviazgo desde su inicio, su declaración de amor… y más allá!

En Ore Monogatari!! conocemos a Gouda Takeo, un estudiante adolescente extremadamente fornido y de apariencia temible. En serio, Takeo mide como dos metros y tiene una fuerza descomunal, pero de entrada vemos que Takeo también es muy querido por sus compañeros, quienes lloran abiertamente por saber que ya no asistirán a la misma escuela (es el día de su graduación de escuela media). Al otro que conocemos es a Sunakawa Makoto, y quienes lloran abiertamente por él son todas las chicas de la escuela ya que Sunakawa es la imagen del chico apuesto con aire melancólico con quien todas quieren salir.

El que todas ellas quieran salir con Sunakawa (“Suna”, para sus amigos) no significa que él esté dispuesto ya que a todas les ha rechazado su declaración. No por preferencias de ese tipo, sino porque todas las chicas que se le han declarado han cometido el error de hablar mal de Takeo (su vecino y mejor amigo desde la infancia). Ese es uno de los muchos ejemplos de la gran amistad que une a esta pareja dispareja, que resulta un tema recurrente a lo largo de la serie.

Bros before hos

Volviendo al primer episodio, sucede que Takeo y Suna están en el tren camino a casa cuando ven a un pervertido acosando a una estudiante, y ahí volvemos a ver la naturaleza noble de Takeo: él no es de los que pueden voltear la cabeza ante una injusticia así que inmediatamente pone al acosador en su lugar y lo lleva a la estación de policía más cercana. La estudiante, una chica llamada Yamato Rinko, queda muy agradecida por la ayuda de Takeo y lo invita a comer un pastel, lo cual lleva a otros encuentros y más pastel. Takeo asume de entrada que ella quiere acercarse a Suna, y a pesar que se ha enamorado de Rinko decide ayudar a que ellos hagan pareja.

Por suerte los creadores de la historia original sabiamente deciden que esta premisa no aguanta como para toda una serie de 24 episodios (no es Friends, donde alargaron romances como por 8 años), y resuelven este triángulo amoroso en el tercer episodio: Para sorpresa de Takeo, Rinko no está atraída a Suna y sólo tiene ojos para él. Por primera vez en su vida una chica puede ver más allá de la apariencia temible de Takeo y lo admira por su buen corazón.

awwwwww…

Lo que sigue es la historia del noviazgo más tierno y anti-diabético que se puedan imaginar, ya que tanto Takeo como Rinko son adorables en su forma particular de ser. Takeo nunca ha tenido experiencia en una relación, asi que depende mucho de Suna para la logística de tener una pareja (cómo vestir, dónde llevarla a comer, etc), aunque por su falta de experiencia a veces interpreta mal los consejos. Y Yamato es el alma más pura e inocente de este mundo, estresándose por cosas tan pervertidas como: tomar de la mano a Takeo, o llamarlo por su primer nombre, o… besarlo (gasp!)

Y en qué consistirá ese “stuff” al que se refiere, hmmm?

Menos mal no ha pensado en qué va a hacer cuando las cosas se pongan más serias…

Sonará como que la serie es suuuper light y no tiene nada de argumento, y… pues no están lejos de la realidad, pero de alguna forma Ore Monogatari!! resulta muy divertida. Ayuda el hecho que dejan de lado el drama y se enfocan en los problemitas que surgen cuando dos personas empiezan a formar pareja. Las primeras citas, cuando los amigos (y/o familiares) de él la conocen a ella y vice versa, la primera vez que van a la playa y se ven en traje de baño, cosas así.

Hay muchos detalles divertidos a lo largo de la serie (como los textos que salen por la cabeza de los personajes mientras están hablando otra cosa), pero la mayor parte del humor es ver cómo Takeo, quien está acostumbrado a pensar con sus músculos, logra superar los retos del noviazgo.

Como el típico problema de: “qué hacer si a tu novia la va a aplastar una viga de acero?”

También hay episodios que se salen un poco de la narrativa del noviazgo de Takeo y Rinko, como para variar las cosas.  Hay unos donde el padre de Suna está enfermo y Takeo decide acompañarlo a expensas de pasar el día con Rinko (de paso vemos el origen de su amistad), otro donde va a nacer la hermanita menor de Takeo e incluso uno donde son amigos de ellos los que están por meterse en una relación. Pero todo lo manejan muy sutilmente, sin tanto drama pero con momentos emotivos regados entre todo el slice-of-life.

En fin, la serie es extremadamente dulce pero con buen humor y termina cayendo bien. Sirve mucho para contrastar y limpiarse el paladar si están en medio de ver otras series con sangre y violencia, o por si sólo quieren demostrar a sus parejas que son sensibles y románticos.