Autorregalo de Navidad: Unboxing del Masterpiece Optimus Prime

Ah, se acerca Navidad, y con esa fecha me vuelvo a permitir el lujo de soltar dinero en frivolidades como la que van a ver en unos momentos. En esta ocasión el gasto será suficiente como para que no me autorregale nada para mi cumpleaños, ya que supera por mucho a cualquiera de mis compras anteriores.  Para esta Navidad la adquisición fue… Masterpiece Optimus Prime!

Me voy a adelantar un poco para dar la conclusión antes de cualquier otro comentario… está palomísima!

Lo primero que me sorprendió del empaque (que en retrospectiva no debió hacerlo) fue el tamaño de la caja. Hasta cuando fui a traer el paquete al courier logré escuchar a los despachadores identificándola como “aquella caja grandota” antes de entregármela.  Una gran parte de ese volumen es el trailer, pero en sí Optimus en modo robot es tamaño hijueputón (recurriendo a términos técnicos).

La siguiente cosa que salta a la vista es que este juguete se ve excelente en cualquiera de los dos modos.  Si lo tuvieron o vieron en fotos, recordarán que al transformar el juguete original quedaba un robot siempre chivazo pero todo cuadradón, que a simple vista se notaba cómo debía transformarse.  Tampoco era como que la transformación tomara demasiados pasos:  piernas hacia atrás, brazos contra el lado de la cabina, remover los puños, esconder la cabeza, etc.  Obviamente los animadores de la serie original tomaron licencia artística para que no se viera tan cuadrado en pantalla, y los diseñadores del juguete se lo tomaron como reto para que fuera exactamente igual a la versión animada.  La transformación a robot y vice versa tiene un montón de pasos adicionales con el único propósito de darle una forma más trapezoidal al torso, de esconder las ruedas y de darle un rango de movimientos impresionante.

Optimus Prime MP10 (izq) y Optimus Prime G1 (der)

Esta versión que me compré es la versión americana, que usa el esquema de colores de la caricatura.  La versión japonesa del robot es exactamente igual excepto por los colores más cercanos a los del juguete de Optimus generación 1.  Yo estaría feliz con cualquier versión, pero debo admitir que me gusta un poco más la de colores brillantes.

Como pueden ver en las fotos anteriores, el paquete incluye al trailer con centro de mando móvil, el carrito Roller, espacio para guardar las armas, y una minifigurita de Spike Witwicky (no Shia LeBeouf, por suerte).   Nuevamente los diseñadores se merecen un premio por el esfuerzo extra de hacer los componentes super intercambiables.  Por ejemplo, pueden sentar a Spike en la cabina de Optimus, en Roller, o en el cañon del centro de mando.  El arma de Optimus puede guardarse en el centro de mando, arriba de Roller (como pueden ver en la foto de arriba), o en un espacio en la espalda del modo robot (el arma se dobla para facilitar su almacenamiento).  También si lo desean pueden enganchar a Roller al centro de mando para que lo ande llevando a donde está Optimus (si se encuentra indispuesto, claro).

Este juguete realmente se ha convertido en la joya de mi colección, no sólo por lo caro (bu si bu) sino por lo detallado. Puntos extra por la nostalgia, claro, pero imponente por sus propios méritos…